Ernesto Barajas, vocalista y líder del grupo Enigma Norteño, falleció a los 38 años tras un ataque a tiros ocurrido el martes en Zapopan, en las afueras de Guadalajara, México. La Fiscalía General del Estado de Jalisco confirmó el homicidio y señaló que las autoridades están llevando a cabo investigaciones para aclarar los detalles del incidente. En el ataque, otro hombre que estaba con Barajas también perdió la vida, mientras que una mujer quedó herida.
Trayectoria de Enigma Norteño y la música de Ernesto Barajas
Barajas fundó Enigma Norteño en 2004, cuando tenía 18 años, y desde entonces se consolidó como una de las agrupaciones más importantes del género regional mexicano. La banda se especializó en «narcocorridos», canciones que relatan la vida de miembros de los carteles de narcotráfico. Este tipo de música ha generado controversia en México debido a su representación de la violencia en un país que ha registrado decenas de miles de homicidios en las últimas dos décadas.
Las canciones de Enigma Norteño lograban cerca de cuatro millones de escuchas mensuales en Spotify, mientras que Barajas también presentaba un podcast en YouTube, entrevistando a personalidades del ámbito regional mexicano. Su contribución musical fue apreciada en el sector, y muchos compañeros lamentaron su fallecimiento, honrando su herencia en la música regional.
Amenazas y contexto de violencia
Originario de Culiacán, Sinaloa, Barajas se crió en un área influenciada por cárteles de drogas y la creación de música regional. En 2023, fue objeto de amenazas relacionadas con el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG). De acuerdo con fuentes locales, una carta atribuida al CJNG advertía a Barajas que no debía cantar corridos sobre ciertos jefes del crimen organizado, haciendo referencia específica a «las hermanas Aquiles y Rana», apodos de figuras destacadas del Cartel de Sinaloa.
La música de Enigma Norteño hacía alusión directa a cabecillas de ambos cárteles. Entre sus creaciones se encontraba una pieza dedicada a Ismael “El Mayo” Zambada, reconocido líder del Cartel de Sinaloa, así como “¿Van a querer más? (El Mencho)”, que mencionaba a Nemesio Oseguera Cervantes, dirigente del CJNG. A pesar de ello, Barajas afirmaba que no poseía conexiones con organizaciones delictivas y que su propósito era meramente artístico, destacando figuras de sus canciones sin involucrarse en actividades criminales.
Impacto personal y profesional de la violencia en el grupo
La trayectoria de Barajas también estuvo marcada por tragedias personales. En 2012, José Baldenegro, baterista de Enigma Norteño, fue secuestrado y asesinado, situación que generó dudas sobre la continuidad de la banda. Barajas destacaba en entrevistas que el grupo siempre había sido cuidadoso con sus letras, evitando atacar directamente a individuos o grupos, con el fin de preservar su integridad y respeto dentro de la industria.
Algunos estados ubicados al norte de México han decidido prohibir la ejecución de narcocorridos porque pueden causar conflictos, al mismo tiempo que recientes iniciativas gubernamentales, como la liderada por la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum, han intentado cambiar el contenido de estos corridos, fomentando canciones que eviten narraciones vinculadas al narcotráfico.
Legado y recordación de Ernesto Barajas
Ernesto Barajas deja un legado complicado. Por un lado, logró establecer a Enigma Norteño como un pilar del género regional mexicano; por otro, su vida y su trabajo estuvieron frecuentemente ligados a la violencia presente en los contextos que describía en sus temas. Su fallecimiento destaca los peligros que encaran los músicos del género y revive la discusión sobre el impacto de los narcocorridos en la sociedad mexicana, así como las acciones que se han tomado para controlar su ejecución.